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IV. La socialización en los estudiantes universitarios de la Universidad Virtual de Quilmes

Miriam Emilia Medina

«Las universidades deben desarrollar mucho más la relación con el entorno,
tanto introduciendo a la sociedad dentro de las instituciones
como dando respuesta a las necesidades de esa sociedad»
José Ginés-Mora (2005)

Una de las preocupaciones más frecuentes de las universidades en latinoamérica y en el mundo, está puesta en desarrollar un sistema educativo que pueda incidir en la calidad de vida y, a la vez, que produzca cambios observables en las sociedades. Un informe de UNESCO sobre la educación superior, expresa que las universidades públicas chocan y colaboran simultáneamente con proveedores privados cuya tensión permanente produce un cambio de escenarios nacionales e internacionales. De acuerdo a lo señalado por el documento “How people Learn”, publicado en el 2000 y realizado por los comités del Consejo Nacional de Investigación de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos, el desarrollo de la ciencia, la investigación del aprendizaje y la práctica educativa, han tenido un impacto escaso en las prácticas educativas universitarias. De este modo, se expresa que existe escasa transferencia entre los estudios académicos y las prácticas universitarias. Siguiendo esta observación y en consonancia con los capítulos compilados en este libro, consideramos pertinente desarrollar las implicancias que tienen, para los estudiantes universitarios en Entornos Virtuales de Enseñanza Aprendizaje (EVEA), los procesos que conforman la socialización en los estudios universitarios. Consideramos interesante reflexionar respecto al sentido del Curso Inicial de Socialización (CIS) de la Universidad Virtual de Quilmes (UVQ) como parte de ese proceso, las tensiones y los desafíos a pensar a futuro desde ese espacio.

De oficios y prácticas en la virtualidad

Para retomar la idea del oficio del estudiante universitario, corresponde mencionar a autores que abordaron este arte-oficio en las últimas décadas desde una perspectiva sociológica, como Dubet, F. (1994,) Colón, A. (1995), Perrenoud, P. (2006) Bourdieu, P. y Passeron, C. (2003,) entre otros. Retomaremos, entonces, la necesidad de entender a ciertas profesiones observándose como un oficio, otorgándole preponderancia a la experiencia y al campo de la práctica en los procesos de aprendizaje, como parte de la conformación identitaria.

Perrenoud (2006) destaca que el oficio de ser alumno es un proceso complejo, constituido por el aprendizaje individual y social, fuertemente marcado por las experiencias y en donde las instituciones en las cuales los sujetos transitan y realizan sus experiencias, pueden apoyar en mayor o menor medida ese tipo de procesos. Podríamos aseverar que esta idea se hace extensible al oficio del estudiante universitario. En efecto, aprender a ser estudiante universitario conlleva exigencias intelectuales, la comprensión y adaptación a lógicas y reglas de funcionamiento propias del nivel. Dice Manuale (2013)

comienzo de cita

[...] “la problemática del aprendizaje de los alumnos de primer año se vincula fuertemente con un conjunto factores que involucran aspectos propios de la vida de los alumnos, sus saberes y formación previa, su contexto social y su capital cultural. Pero también se relaciona con el ámbito institucional de la universidad, con sus actores y sus lógicas, a los cuales los alumnos deben conocer y adaptarse para poder tener un mejor desempeño académico y responder a las demandas, a partir de diversos procesos de negociación. En este sentido, consideramos que para que los estudiantes universitarios en la modalidad virtual, puedan desarrollar experiencias significativas, es imprescindible una institución que acompañe, tanto organizacionalmente, como pedagógicamente [...]”. (p. 46)


La organización político institucional de la universidad, las condiciones que puedan ofrecerles a los cursantes, constituyen ejes claves para acompañarlos en el recorrido, incluirlos y que puedan realizar experiencias en y desde las lógicas propias de los EVEA. En este sentido, las instituciones deben estar dispuestas a acompañar a sus estudiantes, a comunicarse de manera frecuente, a crear y recrear vínculos pedagógicos perdurables, generar condiciones para que los estudiantes puedan sostener la cursada y terminar carreras universitarias virtuales. Para tal fin, consideramos relevante revisar los modos en que los estudiantes se acercan al conocimiento, de qué manera aprenden, qué trascendencia le otorgan al conocimiento disciplinar y en el caso de los estudiantes virtuales, qué tipo de saberes ponderan (de carácter contextual, tecnológico, multimedial o combinados) Retomando lo propuesto por Manuale (2013) creemos que vale la pena reparar en el proceso mediante el cual se alfabetizan académicamente los estudiantes, es decir la relación entre el estudiante y el conocimiento y, a la vez, las relaciones entre estudiantes, docentes, institución, comunidad, sociedad, tal como se planteaba en el inicio. Como expresamos, es necesario interpretar dichas relaciones contextualizadas y sostenidas por políticas, reglas y marcos que resultan posibilitadores de la ampliación de derechos, de la construcción de condiciones de igualdad. Caso contrario, la compleja construcción de qué es ser estudiante universitario virtual, quedará librada al empeño y a los deseos personales de cada uno. Por este motivo es necesario entender el fenómeno de modo relacional, que la organización y la gestión institucional se conviertan en posibilitadoras e integradoras de la socialización en los EVEA.

La construcción del rol del estudiante universitario, como proceso complejo, deberá entenderse individual y socialmente, entramándose con otras variables, en donde las universidades no pueden soslayar las necesidades de los recién llegados ni de quienes vuelven a llegar a los estudios superiores.

En el caso de la Universidad Virtual de Quilmes, las licenciaturas constituyen, en su mayoría, ciclos de complementación, es decir que los ingresantes han cursado carreras y culminado, o bien han cursado un porcentaje de asignaturas de grado, sin finalizarlo. Estamos haciendo referencia a quienes han interrumpido sus estudios universitarios por diferentes causas y eligen continuar los estudios superiores en la modalidad virtual. De esta manera, se incorporan a una propuesta de mayor flexibilidad curricular que, a la vez, les brinda la posibilidad de organizar su tiempo académico y personal de modo diferente al tradicional. Dependerá, entonces, de que las universidades y sus actores puedan generar condiciones genuinas para apoyar la construcción identitaria, tanto intelectual como subjetiva, desde un paradigma democratizador.

Presupuestos con los que los estudiantes comienzan el CIS

Hace más de una década que los autores adoptan, reformulan o critican la conceptualización de “nativos digitales” e “inmigrantes”. Dichos conceptos fueron desarrollados originalmente por Marc Prensky quien, a grandes rasgos, situaba a los nativos como aquellos que habían nacido durante 1980 y 1990 y, como inmigrantes, a quienes lo habían hecho entre 1940 y 1980. Sin ahondar en las críticas, podemos señalar que no existen pruebas empíricas fuertes para sostener que quienes hayan nacido entre los 80 y los 90 conozcan, comprendan y manejen las tecnologías con mayor experticia que los denominados inmigrantes. Si pensamos en ambos grupos, tanto unos como otros, en general cursaron su educación básica en instituciones presenciales, es decir que en mayor o menor grado portaríamos algo de esa extranjería a la que refiere el autor. En este sentido, la imagen de alguien que viene de afuera, que llega desde otro lugar, sigue resultando potente para pensar en los estudiantes que ingresan a la universidad. Ellos necesitan integrarse a una nueva cultura, nuevas costumbres, valores, reglas. Para tales fines, deberán conocer, además, las normas de la institución en la cual están ingresando. Quieren integrarse para poder ser parte del mundo universitario en los EVEA.

En el caso particular de la UVQ, los alumnos son adultos, poseen experiencias y recorridos previos y, en algunos casos, han cursado carreras universitarias en otras universidades (presencial o virtual). Pero es preciso señalar que cada institución y cada modalidad conforman culturas y códigos diferentes. Recordemos que la llamada cultura digital se va conformando bajo formas de organizaciones diversas, con una comprensión de los conocimientos más flexible e interactiva, que requiere, a la vez, de otros modos de enseñar y la utilización de materiales didácticos multimediales que se diferencien de la cultura escritural clásica.

Encontramos pertinente retomar lo abordado por Manuel Área Moreira y destacar una serie de características a tener en cuenta de lo que ellos denominan las TIC como “herramienta de la cultura” (2012).

  1. Permiten el acceso a una gran cantidad de información a diferencia de otros materiales como libros que tienen que estar disponibles físicamente (soporte gráfico)
  2. La información en Internet está disponible y almacenada de forma casi ilimitada, se representa en formato multimedia y es susceptible a múltiples accesos.
  3. Los recursos digitales integran las modalidades simbólicas de los distintos lenguajes de comunicación: los textos, las imágenes, los sonidos, los gráficos.
  4. El lenguaje multimedial puede resultar más atractivo y en algunos casos, más comprensible que el gráfico, motivando a quienes lo utilizan.
  5. La información se encuentra organizada de modo hipertextual, esto difiere a las formas tradicionales y lineales. Por lo tanto no existe una única secuencia de acceso, de lectura ni de interpretación, el hipertexto propone una red de información conformada por texto, imágenes, videos, audios relacionados entre sí.
  6. La publicación como la difusión de ideas y trabajos pueden ser publicados y puestos en circulación de modo sencillo a través de páginas Web, bitácoras, presentaciones multimedia y fotografías entre otras cosas. (p.12).

Sin embargo, muchas veces los estudiantes que deciden cursar una carrera en la modalidad virtual, consideran que conocen o dominan las tecnologías, por el simple hecho de utilizar las redes sociales o tener habilidades para los juegos o pasatiempos tecnológicos. Esta premisa resulta tan frágil como la suposición o el preconcepto que en Internet se encuentra toda la información necesaria y confiable para incluir en la vida académica. Frente a estas ideas, con las que los recién llegados se incorporan a la vida institucional, es interesante trabajar con lo que algunos autores denominan “sobre información”, “sobrecarga informativa” o “infoxicación”. Éste último término adoptado, es definido por Área Moreira (2012), como [...] “el cúmulo y excesiva cantidad de datos genera, inevitablemente, una saturación o intoxicación informacional que provoca que muchos sujetos tengan una visión confusa, ininteligible y de densa opacidad sobre la realidad que les rodea, sea local, nacional o mundial” (p.22). En la actualidad, se recibe más información de la que un sujeto puede procesar. Este hecho no se algo novedoso, es parte de lo que a fines de los años setenta, autores como Peter Drucker, denomina Sociedad del Conocimiento. El concepto fue criticado posteriormente, por equiparar información a conocimiento. Retomando esa perspectiva crítica, consideramos que un estudiante universitario podrá disponer de datos, pero será parte de la socialización, de sus experiencias, de la guía que propongan los docentes, del acompañamiento, para que esa información se transforme en conocimiento. Es decir, que los datos puedan ser apropiados, pensados, criticados, ponerse al servicio de la resolución de un problema. Esta transformación es un proceso que deberá construir el estudiante universitario con guía y apoyo institucional, relacionándose con sus pares y su comunidad.

Para aprender virtualmente, necesitará conocimientos y herramientas propias de la cultura digital.

El Curso Inicial de Socialización en la UVQ

Durante 2011, la Universidad Virtual de Quilmes diseñó el Curso Inicial de Socialización (CIS) con carácter propedéutico, nivelatorio y obligatorio, destinado a los estudiantes de las carreras de grado, en la modalidad virtual, de acuerdo a lo que se expresa en la Resolución (CS) Nº: 696/11 de la UNQ.

Su relevancia está puesta en conocer y enriquecer los conocimientos previos de los estudiantes, e introducirlos en los saberes de los EVEA para que puedan socializarse en y con el Campus, aprendiendo o afianzado el uso de los recursos disponibles propios de los EVEA.

Objetivos centrales

Objetivos centrales del Curso Inicial de Socialización en la UVQ
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En este curso resulta necesario formar estudiantes universitarios virtuales que puedan reconstruir y otorgar significado a la información que circula en las tecnologías digitales de la sociedad del siglo XXI. Entendemos que este trayecto es acotado y es el inicio de un proceso complejo en el cual se arbitran decisiones pedagógicas para poder acompañarlos, para que se constituyan gradualmente en hiperlectores, que puedan apropiarse de conocimientos generales y pertinentes a sus disciplinas, que construyan, poco a poco, una mirada crítica y que puedan elaborar un pensamiento propio frente a problemáticas de actualidad, entre otras cosas.

En el espacio se plantean actividades que promueven el constructivismo y el aprendizaje colaborativo a fin de que los recién llegados, puedan aprender relacionando teoría y práctica.

El equipo docente, interviene pedagógicamente a modo de guía y orientación para favorecer procesos de aprendizaje, en los cuales los estudiantes se vayan socializando en la vida académica ganando autonomía en el uso de las tecnologías para formular y comunicar opiniones fundamentadas.

Contenidos a abordar a lo largo del curso

Contenidos a abordar a lo largo del curso
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En el cuadro se explicitan contenidos abordados a lo largo del curso. Fueron seleccionados con la finalidad de abarcar diferentes tipos de aprendizajes, sustentados en aristas sociales, políticas e institucionales, en un primer momento, es decir lo relacionado con la ciudadanía universitaria. En principio, se prevé una presentación del Campus Qoodle, sus espacios y funciones, para dar a conocer los espacios virtuales que se suelen frecuentar durante la cursada de la carrera y valorar el papel de la universidad pública en Internet.

Con respecto a la promoción de la lectura crítica, consideramos interesante que como estudiantes universitarios en los EVEA, puedan distinguir fuentes válidas en la Web. Por este motivo, trabajamos puntualmente con criterios de credibilidad y planteamos actividades para que los estudiantes busquen información perteneciente a diversas fuentes, la evalúen y puedan saber cuáles son las fuentes más confiables para la elaboración de trabajos académicos.

Promediando el curso, se desarrollan tipologías generales de los trabajos académicos solicitados con mayor frecuencia en las asignaturas, y se propone la escritura de un trabajo estilo monográfico, grupal, a fin de que puedan poner en práctica lo abordado anteriormente con la utilización de la herramienta Google Doc. Este tipo de actividades, busca integrar los saberes disciplinares, tecnológicos, sociales y prepararlos para trabajos similares en las asignaturas.

En los casos de estudiantes que hayan tenido dificultades con la cursada, se prevé una actividad integradora final que reúne temas desarrollados a lo largo de los encuentros virtuales.

Recursos, estrategias, actividades y evaluación en el CIS

Recursos, estrategias, actividades y evaluación en el CIS
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El Curso Inicial de Socialización está diseñado y planificado articulando la teoría y la práctica. Las clases son introducidas por los docentes y se disponen dentro del aula virtual en formato MDM (Material Didáctico Multimedia) realizado en Exelearning, para ver desde el Campus o para descargar. Las clases se organizan de manera hipertextual poniendo a disposición texto, imágenes y fragmentos audiovisuales. Durante cada encuentro se proponen actividades de diferente complejidad, a fin de trabajar con los contenidos presentados, experimentar o resolver alguna problemática de manera individual o grupal. Durante 2015, cada docente grabó en formato audiovisual una breve presentación personal y presentación del curso. A futuro es de nuestro interés elaborar e incluir recursos audiovisuales propios complementarios para seguir profundizando en temas o actividades que han resultado de difícil comprensión en los grupos.

La evaluación se realiza durante el acompañamiento y a través de actividades planteadas, poniendo énfasis en el proceso que va construyendo el estudiante, considerando que cada uno se integra al curso con diferentes saberes digitales y expectativas.

Para lograr la continuidad de los estudiantes en el CIS es necesario que los docentes puedan entablar una relación dialógica permanente (mediada a través de los recursos del Campus) correo electrónico, foros y espacios de comunicación en el aula; y que trabajen de modo articulado con el equipo de tutores académicos.

Es interesante pensar a la educación universitaria en los EVEA, como un proceso complejo, mediado por las tecnologías, integrado, que atiende a procesos y lógicas propias. Por este motivo, consideramos necesario pensar en el diseño de materiales de carácter abierto, que presenten flexibilidad, que permitan efectuar cambios periódicos (en el caso de que fuera necesario) considerando que cada grupo es diverso, que cada sujeto sabe o cree saber distintas cosas, que comprenden de maneras diferentes, que manejan tiempos diferentes y, a la vez, requieren de tiempos diferenciados para conocer, enmarcados en dimensión institucional universitaria.

La comunicación y el apoyo a quienes ingresan

En trabajos precedentes, señalamos que era importante pensar, diseñar y realizar intervenciones que propicien el entendimiento, para ir tejiendo relaciones dialógicas mediadas por las tecnologías y para que los estudiantes vayan construyendo conocimiento en EVEA. Por otro lado, el trabajo de campo realizado entre 2009-2013, en el marco del proyecto I+D “La relación entre las tutorías virtuales y las trayectorias académicas de los estudiantes en el Programa UVQ” visibilizó la palabra de los tutores, de los estudiantes y de los graduados, en la cual aparecía como una fuerte demanda por parte de los estudiantes el ser escuchados. Por decirlo de otro modo, una necesidad de su parte en corroborar que hubiese alguien del otro lado que pudiera brindarle ayuda y contención. En una primer lectura, podríamos pensar que dicha demanda apelaba a la función fática del lenguaje, en términos clásicos del esquema propuesto por Jacobson, es decir comprobar efectivamente que el canal de comunicación estaba funcionando y que no le respondía una máquina, como algunos aclaraban en el grupo focal realizado.Sin embargo, formalizando una lectura más profunda, podemos inferir que en ese pedido de respuestas de diferente índole, subyace la demanda de conformar una relación de confianza en términos pedagógicos, relación que hacemos extensiva a las profesoras/es del Curso Inicial de Socialización.

En nuestro caso particular, los docentes del CIS se desempeñan también como Tutores/as Académicos de las carreras y conocen, a grandes rasgos, cuáles son las expectativas de quienes ingresan a cursar en la UVQ. Hasta el momento, la experiencia y proyectos de investigación precedentes, han visibilizado que los docentes poseen una mirada amplia sobre la formación y esta capacidad sirve para acompañar y dar respuesta desde las diferentes funciones y espacios del Campus de manera articulada.

Qué aprende un universitario en los EVEA

De acuerdo a los resultados obtenidos y a la experiencia transitada en el marco de los proyectos I +D, mencionados en otros capítulos, es pertinente destacar que en los EVEA los estudiantes aprenden a explorar, a discernir, a valorar, a relacionar y a hacer con las tecnologías. En el caso del Curso Inicial de Socialización, el recorrido está pensado como umbral de nuevos conocimientos, algunos de carácter tecnológico, propios del entorno, otros de carácter mayormente disciplinar y otros de carácter transdisciplinar, como los saberes comunicacionales. Todos ellos contribuirán a la formación de los estudiantes universitarios en los EVEA y a seguir conformando aprendizajes a lo largo de la cursada virtual.

Con respecto a los primeros meses de cursada, Urquijo Carmona (2009) señala que el estudiante “ [...] requiere acompañamiento en la adaptación al ámbito universitario que implica mayores responsabilidades, autodisciplina, autogestión, hábitos de estudio [...] por lo que requieren un acompañamiento de corte personal” (p.71).

Qué aprende un universitario en los EVEA
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Perfiles docentes en el CIS

El equipo de profesores del CIS se encuentra integrado por profesionales con diferente formación de grado y, en algunos casos, posgrado, que se dividen para enseñar en las carreras correspondientes al Departamento de Ciencias Sociales y al Departamento de Economía y Administración. Aunque el grupo es diverso, poseen los conocimientos disciplinares necesarios y experticia en los EVEA para guiar a quienes inician su recorrido. En este sentido, entendemos que en la enseñanza virtual, los conocimientos disciplinares son necesarios pero no suficientes para orientarlos. Por este motivo es importante que los docentes posean capacidad de comprensión general, capacidad comunicativa y capacidad para evaluar pedagógicamente las situaciones y los procesos en los que se encuentran implicados. Más aún, en la actualidad y ante grupos heterogéneos, resulta imperiosa una mirada docente que propicie la construcción de conocimiento legítimo sin dejar este hecho librado únicamente a los diseños instruccionales.

La coordinación del CIS realiza encuentros de carácter bimensual para analizar dificultades y logros del curso, distribuidos a lo largo del ciclo lectivo. En este espacio, se proponen reflexiones en torno a la heterogeneidad de los grupos, se acuerdan estrategias, se comentan casos y modos de resolución que han resultado efectivos frente a algunas situaciones. El análisis se efectúa para evaluar en términos organizativos, pedagógicos y didácticos el transcurrir académico.

Durante las reuniones, se trabaja con la dinámica de conversatorio y, posteriormente, se abordan, a modo de taller, casos e intervenciones a fin de reflexionar y buscar estrategias resolutorias comunes. Se evalúa grupalmente qué repercusión tuvo cada una de las clases, el funcionamiento y la pertinencia del MDM, los recursos y las actividades para arbitrar en el caso de que fuera necesario, afianzar o modificar alguno de dichos componentes. El posicionamiento pedagógico parte de la idea que la calidad de los materiales, tanto como el diseño, son importantes pero no necesariamente educativos por sí mismos. En ese sentido, es fundamental la tarea de los docentes que deberán ponerse a disposición para aclarar, explicar, re preguntar, citar ejemplos y pensar en mediaciones adecuadas para cada grupo y estudiante. El equipo docente deberá proponer y guiar para que se produzcan diferentes aprendizajes.

La incorporación del uso de las tecnologías, para Área Moreira, provoca cambios y desafíos para la docencia [...] “la planificación de las actividades no pueden emerger de manera azarosa, sino que debe estar sostenida por un modelo educativo que las ordene y les otorgue coherencia (2012: 36)”. Es decir que la búsqueda de fines pedagógicos conforma parte de un proceso más abarcativo con metas acotadas y enmarcadas en un modelo de educación. De lo contrario, como docentes estaríamos cayendo en una suerte de activismo, actividades fragmentadas sin continuidad ni coherencia educativa.

En coincidencia con los autores hasta el momento desarrollados, es interesante pensar la enseñanza en los EVEA con propuestas que recuperen los principios de la denominada Escuela Nueva y Moderna, la experiencia y la realización de actividades que promuevan la reflexión, la problematización y la resolución. Dichos autores proponen, además, retomar aportes del constructivismo piagetiano, de la teoría sociocultural del aprendizaje de Vigotsky y profundizar en el sentido político filosófico de la obra de Paulo Freire.

Para Eva da Porta [...] “no es posible pensar a las tecnologías concibiéndolas como neutras menos aún a las tecnologías aplicadas a los aprendizajes” (2011: 50). De este modo, la autora retoma la idea de Mattelart (1997) que no es posible pensar a las tecnologías fuera de la cultura, de la historia y de lo específico de las instituciones. Es decir, retomar la idea de alfabetizar y, en este marco, diríamos en tecnologías para contribuir en el proceso de liberación de los sujetos, más allá de las herramientas procedimentales y reproductivas culturales. En ese sentido, vale la pena preguntarse por la apropiación de conocimiento, las relaciones entre los sujetos que utilizan las tecnologías, la socialización y participación como parte de crear y recrear vínculos sociales.

Conclusiones preliminares

La educación universitaria tiene incidencia en la sociedad; actualmente posibilita la integración de sectores sociales y contribuye en la construcción del debate y el sentido democrático. Sin embargo, el desafío es que esa inclusión no se convierta, en lo que Ezcurra, Ana María denomina inclusión excluyente, refiriéndose a la masificación de la educación universitaria pública y gratuita, en donde se manifiestan altos porcentajes de deserción en el ingreso a las carreras (2011). Consideramos que es importante revisar qué sucede en las instituciones universitarias burocratizadas, qué mecanismos, procesos y circuitos, hacen que se terminen convirtiendo en expulsivas. En tal sentido, tanto la propuesta como el modelo pedagógico de la UVQ, constituyen una opción diferente para quienes requieren mayor flexibilidad y tiempo disponible, de manera diferente a la tradicional.

Las instituciones de educación superior universitarias virtuales debemos prever que gran parte de los alumnos no son los esperados por los docentes ni por las instituciones, no son estudiantes abstractos e ideales. Desde la representación de los estudiantes, muchas veces creen saber de qué se trata estudiar una carrera universitaria en la virtualidad; suponen que pueden manejar el tiempo de manera lineal, apelando muchas veces a la lógica de acumulación de lecturas, ingresando al campus con poca frecuencia y pretendiendo resolver de manera rápida las consignas propuestas para cada clase, quizás repitiendo una costumbre instalada de la cultura presencial. Todo esto puede resultar desalentador para quienes quieran cursar en los EVEA. En este sentido, parte de la tarea docente del CIS, consistirá en crear puentes para que quienes estén ingresando a la UVQ puedan integrarse a los estudios superiores universitarios, muchas veces quebrando con lógicas y prácticas establecidas, correspondientes a las lógicas de la presencialidad.

Desde la perspectiva de los docentes del CIS también se producen tensiones entre el plano de lo ideal y el plano de la realidad. Por eso, deberán predisponerse a entender quiénes están del otro lado, cuáles son sus necesidades, de qué manera aprenden y cuáles son sus metas. El desafío será, entonces, trabajar posicionados en el paradigma de la complejidad, reconocer los múltiples saberes previos y orientarlos para que puedan ir asumiendo el rol de estudiante universitario en los EVEA.

La mirada institucional, en tanto, prioriza que la Universidad esté presente guiando a sus estudiantes y, en el caso de los docentes del CIS, continúe fomentando su formación permanente, fortalezca los espacios reflexivos para debatir ideas y proyectos, ajustar los materiales disponibles para que resulten significativos y autoevaluarse para recibir y enseñar adecuadamente a los recién llegados.

Es preciso continuar investigando, leyendo y debatiendo sobre los procesos, la organización y la institucionalización de las prácticas universitarias educativas en los EVEA, apostando a la inclusión como eje transversal, a fin de lograr acceso, permanencia y la graduación de los estudiantes virtuales en la Universidad Virtual de Quilmes.

Bibliografía

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Área Moreira, M. , Alfonso Gutiérrez, M. y Vidal Fernández, F. (2012), “ Alfabetización digital y competencias informacionales. Fundación Telefónica”. Recuperado a partir de: <ddv.stic.ull.es/>

Da Porta, E. Compiladora (2011), “Comunicación y educación. Debates actuales desde un campo estratégico”. Córdoba.

Ezcurra, A. (2011), “Igualdad en educación superior: un desafío mundial”. Editorial: Universidad de General Sarmiento. Colección Educación. Serie Universidad Nº 01.

Ginés-Mora, J. y Fernández Lamarra, N. (2005), “Educación Superior. Convergencia entre América Latina y Europa. Procesos de evaluación y acreditación de la calidad”. Proyecto ALFA-ACRO. Acreditación para el reconocimiento oficial. Argentina: EDUNTREF.

Gutiérrez Pérez, F. y Prieto Castillo, D. (2007), “La mediación pedagógica. Apuntes para una educación a distancia alternativa”. Editorial Stella, La Crujía Ediciones, Buenos Aires.

Manuale, M. (2013), “El oficio del estudiante universitario y el problema del ingreso. Miradas y aportes desde el Gabinete Pedagógico de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas”. Revista Aula Universitaria 15. Año 2013. (pp. 43-57). Recuperado a partir de: <bibliotecavirtual.unl.edu.ar/>

Mena, M. Compiladora (2007), “Construyendo la nueva agenda de la Educación a Distancia”. La Crujía Ediciones, Buenos Aires.

Perrenoud, P. (2006), “El oficio de alumno y el sentido del trabajo escolar”. Madrid. Editorial Popular.

Urquijo Carmona, M. (2009), “Competencias que desarrolla el estudiante universitario que participa en programas en modalidades alternativas”. (El caso del Centro de Educación a Distancia, Universidad La Salle, México). Revista del Centro de Investigación. Universidad La Salle, 8 (32), (pp.67-80). Recuperado a partir de: <redalyc.org/>


* Para ampliar, consultar: <www.virtual.unq.edu.ar/>

* Para mayores referencias sobre las distintas formas de significar la categoría tiempo, sugerimos consultar el capítulo «Estudiantes y docentes, percepciones sobre el tiempo compartido« de Patricia Sepúlveda.

* Con respecto a qué entendemos por democratizador, se realizaron aclaraciones en el capítulo “Reflexiones sobre los estudiantes de las Carreras Virtuales de la Universidad Nacional de Quilmes (UVQ) desde una perspectiva inclusiva”.

* Para ampliar, consultar: <marcprensky.com/>
* Para ampliar, confrontar: <www.druckerinstitute.com/>

* El Material Didáctico Multimedia fue realizado por el Equipo docente, la primera versión, fue modificada varias veces para aclarar, renovar o incluir datos a fin de mejorar a comprensión del mismo.

* Herramienta de código abierto (open source) que facilita la creación de contenidos educativos sin necesidad de ser experto en HTML o XML. Se trata de una aplicación multiplataforma que nos permite la utilización de árboles de contenido, elementos multimedia, actividades interactivas de autoevaluación, facilitando la exportación del contenido generado a múltiples formatos: HTML, SCORM, IMS, entre otros.

* Es preciso recordar que la propuesta de UVQ es principalmente asincrónica y que es importante considerar posibles problemas de conectividad por parte de los estudiantes, por este motivo se diseñó un material que puede descargarse de manera independiente, sin requerir conexión a la Red.

* Los estudiantes de la Universidad Virtual de Quilmes, poseen diferente formación previa, edades, residen en diferentes puntos geográficos (dentro y fuera del país) y cursan carreras pertenecientes al Departamento de Cs. Sociales y/ o al Departamento de Economía.

* Lingüista, fonólogo y teórico de la literatura rusa. Autor clásico considerado uno de los fundadores del Círculo Lingüístico de Moscú (1914) y fundador del Círculo Lingüístico de Praga (1920). Desde su teoría de la Información (1948) articulada en torno a los factores de la comunicación (emisor, receptor, referente, canal, mensaje y código) Jakobson plantea la existencia de seis funciones del lenguaje: la expresiva, la apelativa, la representativa, la fática, la poética y la metalingüística, completando de este modo el modelo de Kart Büler.

* Principios re leídos y resignificados en contexto de la Sociedad del SXXI y en los EVEA.