Marina Gergich y Adriana Imperatore
En este libro confluyen búsquedas diversas que responden a las inquietudes y trayectorias profesionales de cada autor y autora, todos docentes investigadores de las modalidades virtual y presencial de la Universidad Nacional de Quilmes, en diferentes disciplinas, algunos de los cuales forman parte del proyecto de investigación “Desafíos educativos y comunicacionales para la inclusión social, cultural y digital”, dirigido por Adriana Imperatore e integrantes del Programa “Tecnologías digitales, educación y comunicación. Perspectivas discursivas, sociales y culturales”, a cargo Alfredo Alfonso. No obstante, la diversidad temática desplegada en torno a las políticas públicas en educación y TIC, la formación docente de los futuros profesores o las innovaciones tecnopedagógicas implementadas en aulas virtuales de educación superior, un horizonte común recorre los capítulos, a partir del planteo de las preguntas acerca de cómo, mediante qué estrategias o desde qué puntos de partida se pueden lograr procesos inclusivos de innovación pedagógica con calidad.
En la última década se ha planteado un escenario de convergencia tecnológica donde se han interconectado de manera vertiginosa distintos medios y modos de comunicación que confluyen en las múltiples pantallas que dominan la cotidianeidad. En efecto, la cultura digital ha transformado radicalmente los soportes, formatos y géneros tanto discursivos como audiovisuales que atraviesan todas las esferas sociales de comunicación, así como las formas de producir y transmitir el conocimiento. Por eso, cada una de las contribuciones aborda un escenario educativo concreto para pensar las dificultades, desafíos y potencialidades que estas transformaciones plantean. En el caso de nuestra universidad, además, una impronta fundamental de este escenario es la consolidación de una universidad bimodal. Al mismo tiempo, nuestra perspectiva prioriza el sentido en la apropiación y uso de las tecnologías con un fin pedagógico, por eso no se trata de un libro con las últimas novedades tecnológicas que pueden hallarse en cientos de sitios de Internet, sino de un libro que plantea estrategias didácticas innovadoras situadas en contextos específicos y que han acertado en una indagación, una pregunta o una propuesta singular. Toda innovación es relativa y probablemente deje de serlo cuando se la termina de pronunciar, pero cuando las búsquedas se refieren a un contexto educativo en concreto y priorizan las respuestas situadas, alcanzan un sentido y un valor que trasciende el último hallazgo digital y puede extrapolarse en el tiempo a una situación venidera. Ese es el espíritu de estas Innovaciones didácticas en contexto que invitamos a descubrir.
El libro se abre con el capítulo de María Teresa Lugo titulado “La escuela y la cultura digital: el desafío por la calidad educativa con justicia social” en el cual se traza un diagnóstico acerca de lo que se ha logrado y lo que falta en la integración de TIC en educación en América Latina, en el marco de políticas educativas integrales que tiendan a reducir desigualdades. Tal y como afirma la autora, “no es posible lograr mejores resultados educativos sin conmover las bases estructurales por las cuales se genera pobreza y exclusión”. Esta perspectiva regional que hace foco en las políticas públicas es la más adecuada para pensar la multiplicidad de dispositivos existentes no como meras herramientas, sino como ecosistemas para el aprendizaje. Las recomendaciones finales operan como puntos de partida programáticos para cualquier iniciativa educativa mediada tecnológicamente.
El segundo capítulo, titulado “Estrategias didácticas y comunicacionales innovadoras en la enseñanza superior en entornos virtuales” –escrito por Adriana Imperatore–, describe el panorama de las aulas virtuales de la UNQ que ha servido como telón de fondo a experiencias innovadoras, llevadas adelante mediante la implementación del uso de redes sociales con objetivos educativos y la producción e inclusión de recursos audiovisuales en las aulas virtuales.
Por otra parte, en el capítulo tres, “Realidad Aumentada en el marco de la universidad bimodal”, María Ximena Pérez y Marina Gergich abordan las posibilidades y potencialidades que presenta la utilización de Realidad Aumentada en educación en general y, específicamente, lo que esta tecnología puede aportar a la innovación en la elaboración de materiales didácticos que puedan ser valiosos para el modelo académico bimodal de la UNQ.
También, teniendo como horizonte la Bimodalidad en nuestra universidad, Sebastián Torre –capítulo cuatro, “Una experiencia de aprendizaje extendido en educación presencial y virtual”– nos describe una práctica didáctica innovadora con estrategias de enseñanza potenciadas por la utilización del software “BBB” que ofrece el campus virtual, realizada en el marco de la asignatura Fundamentos de Comercio Electrónico, tanto en la modalidad virtual como presencial.
En el capítulo cinco, “Didáctica integral del multimedia y diseño de hipermedias para entornos virtuales de aprendizaje”, Marcelo Aceituno expone un procedimiento integral de enseñanza y de aprendizaje de los lenguajes del multimedia, organizado desde cuatro enfoques complementarios: didáctico, comunicacional, técnico y multimodal. Asimismo, describe el material didáctico que pone en práctica esa metodología destinada a la capacitación de docentes que desarrollan su actividad en aulas virtuales y destaca la importancia del software eXeLearning como posibilitador de estas innovaciones.
Pablo Baumann y Néstor González nos acercan –en el capítulo seis, titulado “Un MOOC para capacitar a docentes de Formación Técnica y Profesional en Bolivia”–, la experiencia de la planificación, elaboración e instrumentalización de un curso MOOC y evalúan los desafíos que debieron enfrentar y las respuestas que han encontrado para lograr sortearlos.
En el capítulo siete, “Materiales audiovisuales como recursos didácticos”, Marina Gergich nos presenta un recorrido por los encuentros y desencuentros entre las instituciones educativas y los recursos audiovisuales y reflexiones acerca de por qué, para qué y de qué manera utilizar los materiales didácticos audiovisuales para agregar valor a los proceso de enseñanza y aprendizaje.
El octavo capítulo, escrito por Paula Florez, se titula “La transmedialidad como oportunidad de innovación en la enseñanza superior en entornos virtuales” y luego de precisar conceptualmente los alcances de la comunicación transmedia, se ocupa de demostrar las ventajas y posibilidades para desarrollar la transmedialidad en entornos educativos virtuales a través de algunas experiencias incipientes pero efectivas.
El noveno y último capítulo, escrito por Clarisa Marzioni y Alejandra Santos Souza, dirige la atención hacia una cuestión decisiva, como las prácticas profesionales en la formación docente. Dicha contribución se titula “Reflexión acerca de las propuestas de formación para las prácticas docentes de los estudiantes del Profesorado de Educación de la UNQ” y plantea cómo los nuevos contextos y realidades educativas en la formación de jóvenes y adultos demandan respuestas creativas y fundadas en prácticas de enseñanza y de aprendizaje que combinen inclusión con calidad.