Una de las funciones principales de los materiales didácticos consiste en brindar acceso a la información. El diseño de la información siempre se ha valido de la integración de medios verbales e icónicos para representar los contenidos. Quizás el cambio más significativo que aconteció en los últimos tiempos sea el de la reasignación de roles de las imágenes respecto del discurso verbal. Actualmente asistimos a una inversión de jerarquías: de una función inicialmente subsidiaria, la imagen pasó a ser la protagonista y el texto el medio de anclaje, tal como lo demuestra la popularidad de las infografías.
En palabras de Raymond Colle (1998) la infografía es la disciplina del diseño gráfico orientada a la producción de unidades informativas verbo-icónicas que tiene por punto de partida a los estadígrafos, la cartografía y la historieta. A las piezas generadas por esta disciplina las denomina "infógrafos", "infográficos" o IG´s, definidos como unidades espaciales en las que se mezclan códigos icónicos y verbales para crear una información amplia, precisa y sintética, en un espacio muy reducido si se lo compara con el que requeriría reproducir la misma información utilizando solamente el código verbal.
En cambio, Alberto Cairo (2009) incluye a la infografía en el ámbito de la visualización de la información: una forma de representación de datos y hechos mediante diagramas y esquemas, definición en la que abarca tanto a la disciplina como a la representación obtenida por esa técnica. Además la describe como una profesión multidisciplinar que incorpora técnicas periodísticas, cartográficas, de diseño gráfico y de visualización científica.