Comenzamos esta unidad mencionando el criterio erróneo con el cual se juzga al sonido como el “hermano pobre” de la imagen y las producciones audiovisuales, y seguramente, al finalizar el tema habremos valorado la inagotable riqueza expresiva de este medio, por la forma en que el sonido nos afecta, pero también por ese modo tan particular que caracteriza a sus códigos simbólicos. Entre las nociones principales nos interesó destacar la importancia de:
- La inclusión de elementos sonoros en distintas áreas científicas.
- Las características de los distintos códigos expresivos: la voz, la música, los ruidos, los efectos de sonido y el silencio.
- La complejidad de adecuación que requieren los textos escritos para convertirse en discursos orales.
- Los vínculos existentes entre la música y el lenguaje verbal.
- El guión, como documento de planificación para locuciones y montajes sonoros.
- Los factores que intervienen en la configuración de la calidad del audio digital.
Además, esta clase intentó enfatizar la necesidad de desarrollar una actitud crítica y de escucha activa que nos permita reencontrarnos cotidianamente con nuestra propia sonoridad. Si a partir de estos contenidos afinamos el oído ante las bandas sonoras y el uso que se hace del sonido en los medios de comunicación, si nos reconocemos en el placer que nos produce la música que escuchamos y las voces de nuestros afectos, si prestamos más atención a los paisajes sonoros que habitamos y podemos definir acústicamente nuestro entorno, estos objetivos actitudinales estarán cumplidos.